Hoy quiero compartir un artículo que apareció en la Revista Viva, escrito por Blanca Cotta, conocida cocinera, que además le gustan las letras.
"Soy profundamente democrática y no me deslumbran las investiduras.
Sin embargo, he dado en llamar así al bizcochuelo para hacerle justicia gastronómica.
Creo, como Honorato de Balzac que: "La igualdad podrá ser un derecho, pero ningún poder humano podrá convertirla en un hecho".
Vale decir, expresándome en términos de cocina, que aunque todas las recetas del mundo tengan derecho a ser importantes, hay algunas (como el bizcochuelo) que por mérito propio sobrepasan a otras en el amplio espectro de la cocina.
¿Por qué?
Quizá porque tiene el alma de "madre" . . . ("padre", ¡perdón!).
Si usted aprende a hacer bizcochuelo a la perfección sabrá también hacer placas de arrollado, princesas, todas las clases de "gateau" que su imaginación pueda soñar y ...
El bizcochuelo pertenece a esa categoría de recetas que deberíamos aprender de memoria porque muchas veces tenemos que recurrir a ellas, porque son como el abc de la cocina.
Recuerde que esta preparación tiene su "identikit" inalienable.
Se prepara sólo con 3 ingredientes: huevos, harina, azúcar (más el perfume o sabor que le quiera agregar).
Claro que una receta tan simple tiene sus secretos: elegir huevos frescos, tamizar la harina y . . . ¡aprender a batir hasta obtener el "punto letra"!
Aunque sé que al decir esto usted tendrá todo el derecho de contestarme como San Juan de la Cruz: "Déjate de enseñar, déjate de mandar, déjate de sujetar y serás perfecto".
Humm...
¡Conoce usted a alguna cocinera perfecta? "
BLANCA COTTA
DE AQUI, DE ALLA Y DE MI ABUELA TAMBIEN
LOS SECRETOS DE BLANCA
TODO EL PODER AL BIZCOCHUELO
REVISTA VIVA, , 11.11.2012
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